Hoy fui a pasar la ITV a nuestro Opel Corsa. El diagnóstico fueron cuatro deficiencias graves -nivel de aceite por debajo del mínimo, falta de luz en la matrícula trasera, ruedas traseras excesivamente gastadas y tapón del depósito de combustible no adecuado- y tres leves -matrícula delantera deteriorada, luz de freno trasera derecha fundida y tubo de escape levemente roto-. Y fue entonces, al leer el papel con todas esas deficiencias, cuando me acordé de Pikas y de que aún tenía que escribir esta entrada.